19 diciembre 2011

No tengo nada...

(No leáis la entrada si no queréis, os aviso que es aburrida...)

Preferiría tener lo que tienes tú...
Algo.
Lo que sea.
No sólo fotos, en las que aparecemos él, yo, y más gente.
No sólo recuerdos, dibujos, momentos... Dispersos a lo largo de dos años.
Si yo tuviera lo que tu tienes... Aunque malo, sabes lo que siente.
Yo no se nada... Vamos, se que no me quiere... Pero no se si me odia, si me ha olvidado, si me consideró en algún momento su amiga... Cualquier cosa que me dijera, sería mejor que vivir así... Porque esto no es vivir... Voy sobreviviendo... Cómo puedo... No se hacer otra cosa...
193 kilómetros...
Es la distancia que me separa de mi vida...
No parece mucho, hay gente que se encuentra más lejos de sus seres queridos...
Pero me estoy muriendo...
Muero por 193 kilómetros...
Y te veo en todos lados... Debo de estar loca, mucho... Pero es que te veo a veces hasta en mi instituto... Cada vez que oigo cierto nombre, doy un bote... Y se que no se refieren a ti, pero lo tengo cómo mecanismo de defensa... Salta por inercia... Y lo oigo en todos lados...
Hay ciertos sitios que no puedo pisar... Cada vez que veo nuestro instituto, no puedo respirar... Siento que me falta el oxigeno...
No te das cuenta de que, cuando te lo reprocha, es que a habido algo...
Yo no he tenido nada...
No me puede reprochar nada, porque nunca hubo nada...
Nunca sabré que habría sido si...
Nunca...
Y me mata...
Y si... No existen los y si... Porque no existe nada... Sólo existes tú, a 193 kilómetros, y yo, en el otro sitio... Y no se unen... Ni por lineas ni por nada... Porque no pueden, porque nunca hubo nada con lo que unirse...
Y no, no puedo ser feliz... Me resulta casi imposible sonreír, lo hago con el mayor de mis esfuerzos... Si me río es porque ya he llorado antes. Si respiro es porque algo me dice que tu también lo estarás haciendo... Eso es lo único que me mantiene viva, que tu también lo estás... A 193 kilómetros, y no sabes si yo sigo o no viva, pero ahí esta...
Y no hay nada más...
No tengo nada dentro...
Sólo está tu respiración...
Y los recuerdos...
Lo único que tengo...



Siento una entrada tan triste... Hoy me siento así... Realmente, y por lo que me han dicho, desde el sábado... No recuerdo nada, pero debió ser horrible para la gente que estaba a mi alrededor... Siento daros la lata ahora a vosotros, pero es la única forma que tengo de desahogarme... Esto, y hablar con Marianne, de donde viene realmente esta conversación interior... Muchas gracias, Marianne, ya lo sabes... Y muchas gracias a todos lo que me tenéis que aguantar... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario